Wieliczka, una mina de sal con una catedral subterránea


Vista general de la Capilla de San Kinga

Wieliczka es una mina de sal polaca situada a unos 14 kilómetros al sureste de Cracovia que contiene una magnífica catedral subterránea excavada a 101 metros bajo tierra: la Capilla de San Kinga. La iglesia, excavada en la roca de sal, es la obra de dos hermanos que trabajaron durante treinta años para completarla en la segunda mitad del siglo XIX con todos sus altares, esculturas y capillas laterales.

La Capilla de San Kinga, catalogada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, impresiona por sus dimensiones: con 12 metros de altitud y 465 metros cuadrados de superficie. Incluso sus lámparas de cristal están hechas con sal.

La mina de Wieliczka es una de las minas de sal más antiguas del mundo aún en funcionamiento, aunque la explotación comercial de la sal concluyó en 2007. Con una profundidad máxima excavada de 327 metros bajo la superficie, la mina cuenta con un laberinto de túneles que suman cerca de 300 kilómetros.

La mina, que comenzó a construirse en el siglo XIII, puede visitarse hasta unos 135 metros de profundidad. A lo largo de los 3 kilómetros del recorrido de la visita se pasa junto a diferentes capillas, salas, esculturas históricas y de antiguos ilustres visitantes, e incluso un lago subterráneo.   



Capilla de San Kinga



Altar principal de la Capilla de San Kinga

Capilla lateral en la catedral subterránea



Capilla de San Kinga

Túnel de la mina de Wieliczka

Una de las capillas de la mina de Wieliczka


Otra capilla de la mina de Wieliczka


Lago subterráneo en la mina de Wieliczka

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